Generalmente las enfermedades de las plantas son superficiales, los insectos pican y los hongos atacan las superficies vegetales. Es suficiente que la planta tenga una epidermis más fuerte, una cutícula más gruesa, para que el parásito no pueda intervenir. Éste es el caso de la vid americana. La corteza de sus raíces es más gruesa que la de la vid francesa; la filoxera rara vez llega a atravesarla. De esta forma los daños son limitados. En cambio, la filoxera pudo hacer desaparecer casi por completo las viñas francesas a principios del siglo XX.
Para mejorar la resistencia de las plantas, se busca actualmente fortalecer las especies por hibridación o por medio de la ciencia genética..
¿Es cierto que una mala higiene bucal puede provocar infartos?
Un estudio realizado por investigadores del Centro Médico de la Universidad de Columbia, Estados Unidos, ha confirmado que controlar las enfermedades de las encías puede prevenir los problemas vasculares. La investigación, publicada en la revista Cinulation, de la Asociación de Cardiología de ese país, indicó que los enfermos periodontales corren mayor peligro de sufrir arteriosclerosis, es decir, un estrechamiento de los vasos sanguíneos que puede causar una apoplejía o ataque al corazón. El doctor Moise Desvarieux, profesor de Epidemiología del Centro Médico de la Universidad de Columbia, asegura que las bacterias implicadas en las caries viajan por el torrente sanguíneo e influyen en la reducción de la arteria carótida, que es el referente principal para establecer la arteriosclerosis.
El Camino a la Pureza del Agua
En toda agua hay impurezas. Aun las gotas de lluvia toman polvo y bióxido de carbono en su caída. Casi todos los ríos llevan desechos industriales y agrícolas, y algunos, agua reusada que es bombeada río arriba —por lo común para riego— y que vuelve corriente abajo. Sea clara o lodosa, toda el agua destinada al consumo humano debe ser limpiada y purificada haciéndola pasar a lo largo de un complejo y eficiente sistema cíe tratamiento, como el aquí presentado. En la operación se bombea el agua a través de tamices que eliminan los desechos voluminosos; luego pasa por filtros de grano fino donde pierde los sedimentos y minerales microscópicos. El agua así limpiada es desinfectada en seguida con cloro o alguna otra sustancia similar y a veces ablandada con cal y sosa. Es cierto que este proceso garantiza su pureza, pero de ningún modo su buen sabor. Un funcionario de una planta purificadora de EE.UU. que toma agua de corrientes muy contaminadas, dice, "Nunca se ha dudado de la potabilidad de nuestra agua, pero sí de su buen sabor".
Aunque pueda parecer paradójico o increíble, son precisamente los vestigios de sustancias minerales —eliminados en el proceso de tratamiento— los que dan al agua de beber su "sabor" característico.
Aunque pueda parecer paradójico o increíble, son precisamente los vestigios de sustancias minerales —eliminados en el proceso de tratamiento— los que dan al agua de beber su "sabor" característico.
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