Aplicar calor
El calor ayuda a aumentar la circulación en un área, trayendo más glóbulos blancos y anticuerpos al área para combatir la infección, por lo que aplicar calor a un forúnculo es uno de los mejores remedios caseros que se pueden usar. Aplique una compresa tibia en el área durante 20 minutos cada vez. Haga esto tres o cuatro veces al día, todos los días, hasta que el forúnculo desaparezca.
Aceite de árbol de té
El aceite esencial del árbol del té tiene fuertes propiedades antibacterianas y antisépticas, que pueden ayudar a tratar la infección bacteriana que causa el forúnculo. El aceite del árbol del té no debe aplicarse directamente sobre la piel, ya que puede tener un efecto quemante. Mezcle cinco gotas de aceite del árbol del té con una cucharadita de aceite de coco o de oliva. Ponga aceite diluido de árbol de té en un hisopo de algodón y aplíquelo en el área dos o tres veces al día. Haga esto diariamente hasta que el forúnculo haya desaparecido por completo.
Polvo de cúrcuma
El polvo de cúrcuma tiene propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, las cuales pueden ayudar a sanar un forúnculo y deshacerse de él rápidamente. Se ha utilizado como un purificador de sangre natural durante miles de años en la medicina oriental como resultado.
Sal de Epsom
La sal de Epsom no es sólo relajante; tiene numerosos beneficios para la salud, incluyendo la capacidad de tratar los forúnculos. La sal puede ayudar a secar el pus, haciendo que el forúnculo drene.
Disuelva la sal de Epsom en agua tibia y remoje una compresa en ella. Aplique la compresa en el área durante 20 minutos cada vez. Haga esto por lo menos tres veces al día hasta que el forúnculo haya desaparecido.
Ungüento antibiótico de venta libre
Usted no puede equivocarse con un ungüento antibiótico de venta libre, muchos de los cuales son de acción rápida y calmante. Debido a que muchas personas guardan un tubo de Neosporin en el botiquín, es posible que ni siquiera tenga que buscar muy lejos para obtenerlo. También puede ayudar a evitar que la infección se propague.
Aceite de ricino
El aceite de ricino contiene un compuesto llamado ácido ricinoleico, que es un antiinflamatorio natural pero potente. Esto, combinado con sus poderosas propiedades antibacterianas, lo convierten en un gran tratamiento natural para los forúnculos.