No es raro que una persona delgada pueda comer más comida que una
persona obesa. Mientras esto va en contra de la lógica, lo cierto es que las personas obesas tienen más grasa en su sección media y alrededor de sus órganos. Alguien delgado no está sujeto a tal condición, lo que permite que su estómago se expanda aún más. Esta es la razón por la que muchos consumidores de competencia son tan flacos.