La porcelana es una cerámica de lujo. Su finura y su transparencia se deben a la pureza de la arcilla con que se fabrica, que se conoce con el nombre de caolín.
El caolín es arcilla casi pura. Los objetos de caolín, a los cuales previamente se ha dado la forma deseada, se cuecen a temperaturas superiores a los 1 500 grados. De esta forma adquieren la dureza y la transparencia del vidrio; los trabajos de porcelana son de una gran finura: paredes de mínimo grosor, ligereza de las asas, elegancia de curvas, etc. Son célebres la porcelana china, que se fabrica desde el siglo VI de nuestra era, y la francesa de Sevres. La primera fábrica de porcelana de España fue creada en Madrid en 1759 por Carlos III.