El jefe de correos es el jefe de la oficina postal y el representante de correos en un municipio. Fiscaliza los fondos de la oficina y recibe o entrega los propios del servicio: tasas, reembolsos, giros, etc.
Cada una de las oficinas del país es regida por el jefe de correos, que tiene a sus órdenes a varios empleados, cuyo número varía según la importancia del lugar. Sus responsabilidades son varias, como complejas las operaciones efectuadas en la oficina postal: recepción, clasificación y reparto del correo, recogida, sellado y envío de las cartas, paquetes e impresos de la localidad, pago de giros, etc. A veces, la oficina de correos lo es también de telégrafos, en cuyo caso las tareas se multiplican, así como las responsabilidades. El jefe de correos supervise, coordina, verifica e interviene en todas las operaciones. En épocas de mucho trabajo, como en Navidad, se comporta además como cualquier empleado, y desempeña aquella labor mas necesitada de ayuda.
