Puede que sea superfluo explicar el papel del altavoz -su nombre ya es de por si muy explicito—; pero no lo es explicar como lo lleva a cabo.
Es un aparato que convierte las variaciones de una corriente eléctrica en sonidos audibles, que pueden estar destinados a un publico numeroso. Funcionan, por tanto, a la inversa del micrófono, el cual convierte los sonidos audibles en variaciones de la corriente eléctrica. Sin embargo, esto no significa que sea su equivalente simétrico, ya que está provisto de órganos particulares que justifican el adjetivo "alta".
ONDAS SONORAS EMITIDAS
Comprende esencialmente tres órganos: un motor, que transforma las oscilaciones eléctricas en vibraciones mecánicas; un difusor, que vibra bajo la acción de este motor y que comunica al aire sus vibraciones; un reforzador, que condense y orienta las vibraciones del aire. Este último órgano puede ser un cono o una pantalla (baffle). Un buen altavoz debería ser, a la vez, sensible, fiel y potente. Desgraciadamente. estas tres cualidades resultan contradictorios, a menos que no se mantengan dentro de límites restringidos y sin salirse de ciertas gamas de frecuencia. Por esta razón, cuando se quiere asegurar una reproducción satisfactoria del conjunto de sonidos de diversas frecuencias, se recurre al empleo de un equipo de altavoces: unos destinados a las frecuencias elevadas (es decir, a las notas agudas), y otros, encargados de difundir las notas graves y de registro medio. Así se logra cubrir toda la gama de frecuencias.