¿Por qué algunas personas prefieren el agua de manantial al agua del grifo?


Un manantial se origina en la filtración de agua, de lluvia o de nieve, que penetra en un área y emerge en otra, de menor altitud, donde el agua no está confinada en un conducto impermeable. Los cursos subterráneos a veces se calientan por el contacto con rocas ígneas y afloran como aguas termales.

Al pasar por las rocas, el agua recoge minerales, que algunas personas consideran buenos para la salud. Desde tiempos antiguos, se ha dicho que el agua mineral cura el reumatismo, algunas enfermedades de la piel y la mala digestión.

El agua del grifo, en cambio, proviene de los ríos y lagos, los cuales se alimentan del agua que fluye de las montañas o la que han recogido de la lluvia. Este líquido se almacena en depósitos o torres de agua hasta que se necesita. La mayoría de las ciudades añaden productos químicos en el agua purificándola antes de distribuirla a los hogares, fábricas y otros edificios.

Una persona bebe un promedio de 60.000 litros de agua durante su vida.