Los científicos norteamericanos Craig D. Woodworth y Anja Mueller, de la Clarksor Uiversity, trabajan buscando alternativas a los
injertos de piel en los casos de quemaduras graves, ya que con esta terapia aún se presentan problemas como la cicatrización o las infecciones. Ellos están investigando sobre
la posibilidad de producir una piel artificial que curaría y funcionaría como una piel normal y que podría usarse con éxito para la reconstrucción quirúrgica o las grandes quemaduras.