Las coníferas presentan varias ventajas sobre los árboles frondosos.
• Su crecimiento es a menudo mas rápido.
• Son mas útiles para fabricar pasta de papel pues tienen fibras de celulosa más largas que los frondosos y de ahí que resulte un papel de mejor calidad.
• A menudo son más fáciles de cultivar, con un mejor desarrollo del plantío.
• Aportan una nota estética al paisaje.
Desde hace algunos años, la plantación de coníferas ha sido muy discutida por varias razones, entre ellas, que tales sembradíos, por ser homogéneos, cuando son talados, dejan un suelo desnudo y sin defensas.
Estas plantaciones de una sola variedad, traen consigo el empobrecimiento de la flora, es decir de las plantas que acompañan a los árboles, empobrecimiento que provoca a su vez una disminución de la fauna.
El humus obtenido a partir de las agujas de los pinos es mucho mas ácido que el de los árboles frondosos y contribuye de esta forma al empobrecimiento del suelo: en los suelos ácidos, los elementos minerales son en efecto mucho mas solubles que en los suelos alcalinos o calcáreos. Cuando se planta una conífera en suelo neutro, se da una acidificación del mismo, y los elementos minerales que contiene se pierden poco a poco por las lluvias.