¡El hombre es el único animal que consume leche cuando es adulto!", denuncian los vegetarianos más radicales. ¿Pero es posible que sea algo tan poco natural? La leche entera aporta vitaminas A, D y E; proteínas, calcio y fósforo. Y aunque es en parte deficitaria en hierro y vitamina C, se trata, sin duda, de lo que mas se aproxima a lo que entendemos por alimento completo. Sin embargo, no todas las personas la toleran bien. A algunas les causa trastornos digestivos. Además, la leche entera es muy rica en grasa, por lo que los adultos deberían reducir su ingestión. A partir de una determinada edad. incluso es posible prescindir de ella, ya que podemos encontrar todos sus nutrientes en otros alimentos.
Y, atención, porque si no es tratada convenientemente, la leche puede ser un excelente vehículo de transmisión de enfermedades, ya sea por el contagio de pandemias que padecía el animal de origen, como tuberculosis bovina, brucelosis o salmonelosis, o por la contaminación de la leche una vez ordeñada.
LA LECHE DESCREMADA
La leche descremada contiene tantas proteínas y calcio como la entera, la única diferencia es la cantidad de grasa total. Al eliminar esta, pueden desaparecer también nutrientes liposolubles y algunas vitaminas, aunque en pequeñas cantidades.
