En el caso de datos o estadísticas obtenidas por sondeo, un encuestador visita el domicilio de las personas a consultar y les presenta el cuestionario a fin de lograr respuestas correctas sobre el tema estudiado.
Las encuestas han de estar sujetas a una reglamentación y a un control. En algunas de ellas se proporciona al encuestador una lista de las personas que debe visitar. En otras, sobre todo en las que se realizan para sondear a la opinión publica y para estudios de mercado, un equipo de encuestadores puede elegir libremente a los encuestados, hasta llegar al número fijado por la muestra. Las respuestas obtenidas han de ser claras, precisas y completas, y ello depende de la claridad de sus explicaciones y de su habilidad para interesar al público. Sea cual sea el método, ha de respetarse su carácter secreto. El encuestador clasifica sus resultados e incluso puede participar en la elaboración de las conclusiones. Se trata de un empleo eventual especialmente idóneo para estudiantes.