Un gas llamado ozono se encuentra en la atmósfera de la Tierra y también cerca del suelo. A este nivel, el ozono es producido por el hombre, especialmente por los gases expulsados por los automóviles. Estos gases reaccionan con la luz del Sol y se convierte en gas de ozono el cual contamina el aire y puede ser tóxico para personas y animales.
Pero en la atmósfera, el ozono se produce de forma natural y ayuda a conservar la vida en la Tierra porque forma un "escudo" que la protege, impidiendo que los rayos ultravioleta del Sol nos alcancen. Desde 1985, los científicos están preocupados porque la capa de ozono disminuye año tras año. Se han detectado zonas tan delgadas que parecen agujeros. Estos "agujeros" se mueven y se ensanchan todo el tiempo, pero se encontró uno muy grande sobre la Antártida. Se cree que muchos gases producidos por el hombre, como los de los aerosoles, han disminuido la capa de ozono.
¿Qué pasaría si la capa de ozono desapareciera? Los dañinos rayos del Sol pasarían directamente a la Tierra, ocasionando cáncer de piel, cataratas en los ojos y dañando las plantas. La única forma de impedir que la capa de ozono desaparezca es dejar de emitir gases contaminantes al aire.