Según la mitología, se cree que Marte era el Ares griego, dios de la guerra. No obstante, Marte fue esencialmente un dios romano. En la literatura y en el arte se hace poca distinción entre Marte y Ares.
La mitología sostiene que era hijo de Juno y de Júpiter. Rómulo y Remo, que fundaron Roma, fueron sus famosos hijos mellizos. Entre sus emblemas se contaban la lanza y la antorcha ardiente.
En el centro de la ciudad de Roma existía un templo de Marte donde se guardaban sus sagrados venablos. En la antigua Roma, el deber del cónsul al estallar la guerra era sacudir los venablos de Marte al grito de "Marte, despierta". Si los venablos se agitaban por sí solos, esto se consideraba mal presagie.
Tanto los meses de marzo como el cuarto planeta del sistema solar llevan nombres inspirados en el de este dios romano.