El galvanismo es un fenómeno físico por el cual dos metales diferentes, que generalmente son el cobre y el cinc, producen electricidad al ponerse en contacto con un líquido interpuesto.
El descubrimiento de este fenómeno, que permitió a Volta realizar sus estudios acerca de la electricidad, se debe al físico y médico italiano, Luigi Galvani (1737-1798).
Galvani no se proponía encontrar la electricidad dinámica o galvanismo; se dedicaba a la anatomía principalmente, y en una ocasión en que le había hecho la disección a una rana, la colocó sobre una mesa encima de la cual había una máquina eléctrica. Uno de sus ayudantes tocó casualmente los nervios de las patas del animal con un cuchillo de disección, y éstas se contrajeron violentamente. Al repetir el contacto, notaron que lo mismo sucedía cuando se hacían saltar chispas de una máquina eléctrica.
Galvani hizo gran número de experimentos de esta misma índole y trató de aislar la electricidad de la rana. Cuando por fin publicó una obra con sus ensayos, suscitó el interés de numerosos físicos y fisiólogos de su época, que se dedicaron a repetir los experimentos de Galvani e intentar mejorarlos.
Volta fue uno de los principales físicos que se dedicó a estos estudios, aunque, en muchos aspectos, no estuvo de acuerdo con las teorías de Galvani.