Oro, el metal más maleable

EL ORO

EN enero del año 1848, un colono americano llamado James Marshall, recorría a caballo las solitarias comarcas de California. Se dirigía hacia las zonas boscosas de la costa donde quería ins­talar un aserradero. Tras un largo caminar lle­gó finalmente a las cercanías de San Francisco El lugar le pareció indicado: abundante en bos­ques y atravesado por un río, el Sacramento, que podía ser utilizado para el transporte de los tron­cos. Pocos días después de su llegada, el colono, mientras exploraba las zonas próximas al río, en­contró casualmente una gran piedra amarillenta: era una pepita de oro. Entusiasmado se puso a buscar a su alrededor; encontró otra, y después otra más. Había descubierto una mina de oro, la más rica del mundo. Ya en la antigüedad era conocido ese metal. Los egipcios explotaban mi­nas de oro por medio del lavado de arenas aurí­feras. Los romanos extraían oro de las minas de España, de Francia y de Italia.
El oro hallado en las arenas de los ríos es un residuo de yacimientos secundarios... Y ¿cómo es que el oro está mezclado con la arena? Lo ha depo­sitado en ella el agua de los ríos que ha corroído rocas auríferas en las laderas de las montañas.
Pero sólo en el siglo XIX fueron descubiertos grandes yacimientos en California, en Alaska, en Australia, en Rusia y en África. Y dado que los medios de extracción se fueron modernizando, aumentó la producción de oro en el mundo.

El oro es llamado metal noble porque no se oxida y no es atacado más que por el agua regia y por el cianuro de potasio y de sodio.
Tiene un peso específico de 19,3 o sea que pesa 19,3 veces más que el agua (1 litro de agua pesa 1 kg, 1 litro de oro pesa 19,3 kg).
El oro es el metal más maleable. En efecto, lami­nándolo pueden obtenerse placas de oro tan su­tiles que, poniendo mil, una encima de otra, se consigue un espesor de un milímetro. Es un me­tal más bien blando; para convertirlo en más duro se lo mezcla con pequeñas cantidades de cobre y de plata. El oro mezclado con plata es utilizado en orfebrería para fabricar garganti­llas y otros objetos labrados; a menudo se lo mezcla con cobre para la fabricación de mone­das. Si en un objeto de oro se ve grabado "oro 24 K" (K = quilates) quiere decir que dicho objeto está constituido por oro puro. Pero, por lo general, el oro es de 18 quilates: o sea que está constituido por 18 partes de oro y por 6 par­tes de plata. El porcentaje de oro en las monedas está indicado por la palabra "ley".
La ley más utilizada en las monedas de oro es 900 %0 (si una moneda pesa 10 gramos, 9 gramos son de oro puro y 1 gramo es de cobre).