Los científicos pueden haber resuelto uno de los misterios más perdurables de la Luna: ¿por qué hay rocas magnetizadas en la superficie lunar, cuando se sabe que la Luna no tiene un campo magnético global?
Muestras de rocas lunares traídas por los astronautas del Apolo proporcionaron evidencia de un antiguo campo magnético en la Luna unas 100 veces más débil que el campo magnético de la Tierra.
En la Tierra, el movimiento de su núcleo interno de hierro produce una carga eléctrica que genera un campo magnético global.
Los científicos pensaban originalmente que un proceso similar podría haber generado un campo magnético lunar. Sin embargo, el pequeño tamaño del núcleo de la Luna y otras consideraciones a tener en cuenta no se ajustaban a esta teoría.
Ahora, dos nuevos estudios publicados en la revista Nature han llegado con las posibles explicaciones para el campo magnético lunar.
Dínamo Lunar
Christina Dwyer, de la Universidad de Santa Cruz, California, dice que un antiguo geodínamo pudo haber existido en el pasado lejano de la Luna.
Dwyer y sus colegas científicos dicen que el campo magnético de la Luna se generó debido a que su núcleo líquido alguna vez rotaba de manera diferente a su manto sólido.
Este movimiento diferencial fue causado por la interacción gravitacional, cuando la Luna estaba mucho más cerca de la Tierra, provocando una oscilación en el eje lunar mientras rotaba.
Dwyer y sus colegas dicen que esta dínamo lunar podría haber operado de esta manera por lo menos mil millones de años, terminando sólo cuando la Luna retrocedió lo suficientemente lejos de la Tierra.
"Esta es una manera muy diferente de alimentar una dinamo que implica agitación física, parecido a agitar un bol con una cuchara gigante", dice Dwyer.
El Dr. Brad Carter, astrónomo de la Universidad de Southern Queensland midió correctamente el nivel de intensidad del campo magnético observado en las muestras de roca lunar.
"La teoría es lo suficientemente flexible como para ser capaz de modificar la historia del campo magnético de la Luna y nos dice algo sobre la historia de la órbita de la Luna también", dice Carter.
La teoría del Impacto
Otros científicos, como el caso del Dr. Michael Le Bars de la Universidad de Marsella en Francia, proponen que los repetidos y catastróficos eventos de los primeros impactos en la historia de la Luna pudieron haber cambiado el ritmo de rotación, provocando distorsiones en el límite núcleo-manto de nuestro satélite.
Le Bars y sus colegas dicen que esto pudo causar movimientos diferenciales en el núcleo, con lo que se alimentó un dínamo lunar transitorio.
Carter dice que estos impactos por meteoritos produjeron enormes cantidades de energía.
"La energía liberada de los impactos fue lo suficiente como para afectar la dinámica del núcleo, lo que generó un campo magnético", dice Carter.
"Esta teoría también predice un campo magnético alrededor de un centenar de veces más débil que el de la Tierra, que es lo que vemos hoy en día."