La planta del café es un arbusto al que durante su crecimiento no le resultan muy gratos los rayos del sol. Esta es la razón por la cual en las plantaciones se suele observar la presencia de plantas de sombra, como por ejemplo las acacias, ordenadas en hileras.
El café puede alcanzar los ocho metros de altura. Sus hojas son ovaladas, verdeoscuras y brillantes. Las flores brotan reunidas en ramitos junto a la axila de las hojas, y son blancas y perfumadas. Los frutos son unas bayas escarlata, de forma ovalada, que contienen dos huesos en cuyo interior se encuentran las semillas. Estas semillas, convenientemente tostadas y molidas, producen el polvo de café.
La bebida que se obtiene contiene cafeína, substancia que resulta estimulante para el corazón y el sistema nervioso.