Lo básico sobre las tarjetas de débito


Cuando abrimos una cuenta de cheques o una de ahorros, inmediatamente recibimos una tarjeta de débito con la que podemos comprar en la mayoría de los lugares: centros comerciales, supermercados, estaciones de gasolina, restaurantes... La tarjeta de débito nos evita llevar dinero efectivo encima o una chequera. Con sólo presentar la tarjeta de débito, el monto de la compra se deducirá de nuestra cuenta de cheques. Estos son pagos que retiramos del dinero depositado (es como si estuviéramos retirando el efectivo). Por otra parte, las tarjetas de nómina sirven para depositar nuestro salario. Una vez que este entra en la cuenta, ya podemos usar la tarjeta para realizar compras, pero siempre de acuerdo con el dinero que tenemos depositado. Al igual que las transacciones que realizamos en el cajero automático, debemos anotar las efectuadas con las tarjetas de débito o de nómina.