A finales del siglo XVII, el físico Inglés, Sir Isaac Newton, razonó que debido a que la luz viaja en línea recta y proyecta sombras nítidas se comporta como una pequeña corriente de las partículas. Otros científicos no estuvieron de acuerdo. Argumentaron que la luz viajaba en ondas porque se dobla ligeramente alrededor de los objetos y porque dos haces de luz pueden pasar a través uno del otro. Esto sólo podría suceder si la luz viaja en ondas.
La controversia terminó cuando se demostró que la luz muestra un patrón de interferencia. Dado que las ondas sólo exhiben patrones de interferencia, la luz debía estar compuesta de ondas. Cien años más tarde, Albert Einstein desafió esta teoría luego de estudiar el comportamiento de la luz cuando choca en los objetos metálicos. Einstein declaró que la luz se compone de pequeños paquetes de energía, o fotones.
Pero... ¿la luz está compuesta de ondas o partículas? Los científicos han concluido que la luz tiene las propiedades tanto de las ondas como de las partículas. Cuando viaja, la luz actúa como una onda. Cuando es emitida o absorbida por los objetos, la luz actúa como una partícula.