Hestia (o Vesta) es una diosa de la mitología griega que recibe relativamente poca atención en comparación con los otros dioses y diosas, aunque ella era en realidad una figura más bien interesante. Como la diosa del hogar y el fuego, Hestia tenía un altar en cada hogar en la forma de chimenea en la cocina, que se mantenía constantemente encendida. Los griegos y los romanos le rendían veneración como un símbolo del esfuerzo de la comunidad, y fue descrita como la diosa más gentil, caritativa y amable del monte Olimpo.
Según la leyenda, Hestia es la hija de Cronos y Rea. Originalmente, ella estaba entre las 12 principales deidades del Monte Olimpo, pero le dio su asiento a Dioniso para evitar un conflicto, y porque prefería la vida como cuidadora del fuego sagrado en la montaña. Hestia también se comprometió como virgen después de que Poseidón y Apolo se pelearon por ella, lo que llevó a Zeus a ponerla a cargo de los sacrificios. Como resultado, la gente le rendía homenaje al principio de todos los sacrificios, para garantizar que el evento se realizara sin problemas.
En todas las ciudades importantes había un fuego central cívico dedicado a Hestia, con el cual se encendían ramas que se llevaban a nuevos asentamientos y colonias para repartir la buena voluntad de la diosa a estos lugares. Los hogares individuales también dedicaban sus chimeneas a Hestia y era tradicional transportar los bebés recién nacidos en torno al fuego para invocar su bendición. En tiempos romanos, el fuego del hogar dedicado a Vesta, como se la conocía en Roma, no podía ser extinguido sin los rituales adecuados, y no se podría reactivar sin purificaciones y oraciones.
Mientras Hestia es a veces marginada como una diosa doméstica y una deidad menor, es en realidad una figura interesante en la historia griega y romana. Debido a que en cada casa había un altar dedicado a Hestia, mucha gente le oraba con más frecuencia que a otros dioses y diosas. Hestia era una figura familiar, a diferencia de los dioses lejanos y terribles como Zeus. La hospitalidad y la cooperación cívica que ella simbolizaba eran muy importantes, y lo siguen siendo todavía en esa región del Mediterráneo.
Una historia interesante sobre Hestia es la leyenda de su nacimiento. Según los mitos, es la primera y la última hija de Cronos y Rea, porque nació primero y luego es devorada por su padre, igual que a sus hermanos, debido a que Cronos temía que lo depusieran del poder cuando éstos crecieran. Cuando Rea engañó a su esposo para que regurgitara a los niños, Hestia fue la última en salir, ya que ella había sido la primera en entrar, y como resultado fue la hija primogénita cuando salió de su madre, pero la hija última cuando lo fue de su padre.