La tercera generación de normas de accesibilidad y velocidad para los dispositivos móviles se abrevia a menudo como la tecnología 3G. Estas normas son establecidas por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT). La tecnología 3G permite el uso del teléfono móvil en una zona más amplia, así como acceso a Internet de banda ancha y llamadas de video y es accesible en dispositivos electrónicos móviles.
3G no sólo permite que estos servicios sean utilizados en una amplia zona, sino promete mayor velocidad y ancho de banda también. Los dispositivos que utilizan 3G son capaces de ser utilizados en más lugares del mundo, debido a la compatibilidad diseñada intencionalmente en el sistema. A pesar de que la conveniencia y velocidad se han mejorado con la tecnología 3G en comparación con otros sistemas, la velocidad depende en gran medida del movimiento del dispositivo receptor, por ejemplo un teléfono móvil. El estándar 3G ofrece transferencia de datos hasta dos megabits por segundo cuando el dispositivo está detenido o en interiores, pero esta velocidad baja a 384 kilobits cuando se está caminando con el aparato, y disminuye de nuevo a unos 144 kilobits por segundo en un vehículo en movimiento .
El nombre "3G" implica que hay dos generaciones anteriores. El servicio de primera generación fue incorporado en 1980 en la era de las redes celulares los cuales eran llamados servicios avanzados de telefonía móvil (AMPS). El servicio de 1G era analógico en una sola banda de frecuencias de radio. Esto fue más que suficientemente para la mayoría de los clientes de ese tiempo, pero como la popularidad y la capacidad tecnológica del servicio de telefonía móvil aumentó, las innovaciones fueron necesarias para mejorar las redes de servicios.
El servicio de segunda generación se inició en la década de 1990. La transmisión digital de voz fue presentado por primera vez por las empresas de telecomunicaciones móviles, lo que permitió varias llamadas por canal y el uso de más bandas de frecuencias. El mayor salto fue de 2G al servicio 3G, ya que este último incluye mucho más que sólo llamadas telefónicas. Debido a que 3G es una tecnología tan avanzada en comparación con sus predecesoras, su aplicación no ha sido perfecta o universal. Algunos países han retrasado la concesión de licencias 3G, mientras que en otros, se han expedido licencias pero el interés de los consumidores es modesto hasta cierto punto.
A pesar de un crecimiento algo lleno de baches, la tecnología 3G está avanzando, y cientos de redes de 3G se encuentran en operación. El siguiente paso evolutivo en las telecomunicaciones, es la apropiadamente llamada tecnología 4G, que promete aún mayores tasas de transferencia de datos y la capacidad de tomar ventaja de una amplia gama de bandas de frecuencia.