Mercurio es el planeta más cercano al Sol, a menos de la mitad de distancia de la Tierra a nuestra estrella central. Se podría pensar que las temperaturas en Mercurio son muy calientes. Pero curiosamente, ¡algunas partes del planeta está mucho más frías que la Tierra!
Al igual que todos los planetas, Mercurio gira sobre su propio eje, de modo que un lado del planeta está frente al Sol y el otro lado está en oscuridad. El lado que mira al Sol puede llegar a tener temperaturas de más de 350 °C.
Pero Mercurio no tiene atmósfera para guardar este calor. Por eso, cuando en Mercurio va anocheciendo, el ambiente rápidamente se va enfriando.
En el lado oscuro de Mercurio, las temperaturas pueden bajar hasta –170 °C, ¡más frío que en cualquier lugar de la Tierra!