¿Todos tenemos un punto ciego?

Sí, pero no es nada para alarmarse. Un punto ciego es simplemente un punto en el que sostendrías un objeto pequeño y no lo podrías verlo. Esto ocurre porque hay un punto en la retina donde el nervio óptico sale del ojo, justo debajo del centro de la parte posterior del ojo, y no recibe imágenes.

Este punto no es sensible a la luz, así que si una imagen llega a este lugar, será invisible a los ojos. Cuando miras a ese mismo objeto desde una distancia mayor, el cerebro llena este punto ciego y se verá una imagen total.

Intenta este experimento para encontrar tu punto ciego. Ten a mano una hoja de papel a unos 30 cm delante de ti. Cierre tu ojo izquierdo y abre el ojo derecho. Mira detenidamente en el lado de la izquierda. Ahora acerca la cabeza lentamente hacia la hoja, a continuación, aléjate de ella. Por un momento, el lado a la derecha desaparece por completo. Es en esta parte que el punto de la imagen cae exactamente en el punto ciego.