Dato curioso: Las hormigas no toleran a las "tramposas"

Las hormigas obreras que tratan de reproducirse en colonias con una reina dominante son atacadas físicamente por otras obreras, un estudio dice.

En la sociedad de las hormigas, las obreras dejan de reproducirse para dedicarse completamente a la reina y a los hijos de ésta, los cuales son sus hermanos y hermanas.

Los investigadores encontraron que los químicos producidos por las hormigas delatan su status reproductivo.

Los hallazgos de un equipo de investigadores alemanes y estadounidenses son publicados en Current Biology.

Para probar la idea, los científicos aplicaron un compuesto sintético típico de individuos fértiles a hormigas obreras normales pertenecientes a la especie Aphaenogaster cockerelli.
En las colonias donde una reina estaba presente, las obreras con el químico aplicado fueron atacadas y expulsadas por las otras hormigas.

Pero este no fue el caso en las colonias sin reina, donde las obreras eran libres de reproducirse.

Jurgen Liebig, investigador de la Universidad de Arizona en Tempe, mencionó que los químicos producidos por las hormigas tramposas son un "signo inherente y confiable".

Esta política reproductiva juega un papel importante en mantener la armonía en su mundo, explicó el Dr Liebig.
"La idea de que la armonía social depende en sistemas estrictos para prevenir y castigar a los individuos tramposos aplica a las sociedades más avanzadas," agregó.

Para que el engaño sea una estrategia efectiva para algunas hormigas, se necesitan dos condiciones a satisfacer:
Primero, las hormigas obreras necesitarían suprimir las señales químicas que las delatarían de sus cuerpos.
Segundo, también necesitarían que sus huevos carecieran de tales señales, para que su prole no se distinguiera de aquella de la reina.

Algunas especies de hormigas son conocidas no sólo por atacar a las obreras tramposas, sino también de destruir sus huevos.