La energía geotermal proviene del calor de las profundidades de la Tierra. A unos 30 kilómetros bajo la superficie hay una capa conocida como el manto terrestre. Esta es la fuente del gas y la lava que erupciona de los volcanes. Manantiales y géysers, con temperaturas por encima de los 250 grados celsius, también son calentados por el manto.
Debido a su gran temperatura, el manto es una prometedora fuente de energía, especialmente en las áreas donde el agua caliente esta muy cerca de la superficie.
Islandia, país que tiene una gran cantidad de volcanes y manantiales, aprovecha eficientemente este recurso de energía, cerca del 85% de las casas la usan.