¿Qué son los mimos?


   Los mimos son actores capaces de interpretar una obra teatral sin hablar. Expresan las emociones y los pensamientos únicamente con ademanes, actitudes y expresiones del rostro.
   "Mímica" significa, ante todo, "imitación". Los espectadores del teatro popular antiguo gustaban de asistir a funciones en que los actores imitaban, en son de burla, los gestos y palabras de determinadas personas. Posteriormente, durante la Edad Media, surgió en Italia la pantomima, forma teatral que ya se conocía en Roma poco antes de nuestra era y en la cual no se utilizaba la palabra. Con el tiempo, Arlequín y Polichinela, personajes de la comedia italiana, fueron introducidos por los mimos en sus representaciones. En el siglo XIX, un célebre mimo, Gaspard Deburau, creo e hizo famoso el personaje mudo de Pierrot.

¿Qué es un prestidigitador?


   El prestidigitador es un artista tan seguro de sus gestos y de dedos tan hábiles que es capaz de hacer aparecer o desaparecer ante los ojos del espectador los más diversos objetos: naipes, monedas, pañuelos, ¡e incluso palomas y conejos!
   La prestidigitación era ya conocida y practicada en la antigüedad. El prestidigitador es un ilusionista dotado de gran habilidad manual, que conserva gracias a un entrenamiento constante. Logra dar al espectador la impresión de que ha visto perfectamente todas sus manipulaciones. cuando en realidad no es así. A veces aprovecha las extrañas propiedades químicas de determinadas sustancias. En otros casos, ciertos mecanismos de precisión, ocultos en los objetos que utiliza en sus actuaciones, le permiten la realización de trucos inesperados y de gran espectacularidad.

¿Cuándo se construyó el monasterio de El Escorial?


   El Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, enclavado en las estribaciones meridionales del Guadarrama. fue mandado construir por Felipe II para conmemorar la victoria de las tropas españolas sobre las francesas en la batalla de San Quintín.
   Felipe II decidió construir este monasterio que además de conmemorar este hecho sirviera, a la vez, para enterrar a los monarcas de España, deseo, este ultimo, expresado por su padre. El lugar elegido para construir el monasterio fue uno de los valles del Guadarrama, situado a 1.028 metros de altura y a 36 kilómetros de Madrid. Las obras se iniciaron en 1563 y terminaron en 1584, a las órdenes del arquitecto Juan de Herrera. La planta del edificio se inspira en los patrones del renacimiento italiano, al cual se ha despojado de todo exceso y se ha dado una sobriedad muy española. Por otra parte, las riquezas de todo orden que atesora en su interior El Escorial, hacen de el una enorme obra de arte, orgullo de España.