Axum o Aksum, vieja ciudad etíope, considerada la ciudad santa de ibisinios de religión copta, fue la capital de un antiguo reino. Todavía hoy se levantan en su perímetro impresionantes obeliscos esculpidos
las estelas de Axum
Las estelas de Aksum, todavía numerosas hoy en día, son unos monumentos monolíticos que llegan a alcanzar una altura de hasta 30 metros. Los escultores labraron en ellas falsas puertas y ventanas, como si se tratase de auténticos edificios, representando tal vez Las residencias de los dioses. Las estelas reposan sobre unos basamentos probablemente destinados a los sacrificios rituales. El mayor de estos monumentos, en la actualidad roto en cuatro pedazos, alcanzaba la altura de 33,50 metros, y la más alta de las estelas todavía en pie tiene 21. En la misma aparecen nueve falsos pisos, con tres ventanas cada uno. Es un testimonio de la pujanza de una civilización mal conocida y que desapareció en el siglo IX de nuestra era.