Todas las ciudades modernas tienen un cuerpo de bomberos. El fuego puede hacer mucho daño, y debido a esto, se han inventado varias maneras para combatirlo eficazmente. En la actualidad, hasta las ciudades mas pequeñas cuentan con un cuerpo de bomberos.
El cuerpo de bomberos de una ciudad siempre tiene bombas para apagar los incendios, y carros provistos de escaleras con ganchos. Una bomba para apagar incendios proyecta a presión una gran cantidad de agua. Los carros bombas también llevan pequeños tanques llenos de substancias químicas. Estas substancias son, a veces, mejores que el agua para apagar ciertas clases de incendios. El agua no sirve para apagar el fuego del aceite ardiendo. Las escaleras de ganchos permiten a los bomberos llegar a los pisos altos de los edificios que se queman.
Las ciudades que están a las orillas de los ríos, generalmente tienen barcos para apagar los incendios. Las bombas de estos barcos extraen el agua de los ríos para luchar contra el fuego cercano a las riberas.
Los incendios de los bosques se combaten de manera diferente a los incendios en las ciudades, ya que en el campo no hay bocas de riego que suministren agua. Uno de los procedimientos empleados consiste en talar una ancha franja de arboles a poca distancia del incendio. Al llegar las llamas a la zona talada no puede propagarse el fuego; falto de combustible, y aislado así, es más fácil apagarlo. Otras veces se abre una zanja profunda, con el mismo objeto.
A menudo, cuando comienza un incendio, no hay tiempo para esperar que los bomberos lleguen. Todos debemos conocer la manera de apagar fácilmente algunos incendios pequeños.
Una manera practica y sencilla de apagar algunos fuegos es sofocarlos con un abrigo, una manta o un tapete grueso. Este es un medio muy rápido y eficaz para apagar las ropas de una persona cuando estas arden.
Los extintores también prestan gran ayuda. Existen varios tipos. Unos de ellos contienen una substancia química llamada tetracloruro de carbono; esta substancia se presenta generalmente en forma líquida, pero se transforma en gas cuando se pone en contacto con el fuego. Otro tipo de extintor lanza un chorro de agua con burbujas de bióxido de carbono. El agua y las burbujas apagan las llamas al enfriar lo que se está quemando y al alejar el aire. Otra clase de extintor lanza una gran cantidad de espuma que sirve para sofocar el fuego y apagarlo.
La mejor manera de combatir el fuego es procurar que este no se inicie. Si todos tuviéramos cuidado en evitar los incendios, los bomberos no tendrían que arriesgarse tanto.