Un centro estadounidense de fertilización in vitro ha desarrollado una nueva técnica para separar los espermatozoides con cromosoma Y (masculino) de los que llevan el X (femenino).
Esta consiste en marcar el ADN de los espermatozoides con colorante que se vuelve fosforescente bajo el rayo láser. Como el cromosoma X es mas grande, resplandece más brillantemente que el Y. Una computadora detecta la diferencia y transmite una carga eléctrica positiva a los espermatozoides X y una negativa a los Y. Así pueden ser conducidos por diferentes tubos de ensayo debidamente identificados con el rosa para las niñas y el azul para los niños.
Si los futuros padres quieren una niña, el óvulo se mezcla con los espermatozoides rosas, o con los azules si desean un varón. Una vez fertilizado el óvulo, el embrión obtenido se implanta en el útero.
