Las autoridades de aviación en Swazilandia han establecido duras sanciones a las brujas que vuelen a una altitud mayor de 150 metros.
Esta extraña ley de aviación destaca el grado en que las autoridades de este pequeño país africano toman en serio a la brujería. Las escobas utilizadas por las brujas se consideran similares a otros dispositivos de transporte más pesados que el aire y cualquier persona que sea descubierta volando uno por encima de los 150 m serán detenida y sometida a una fuerte multa. De acuerdo con la ley, volar por debajo de los 150 metros no es un problema.
Las leyes fueron reiteradas tras la detención de Hunter Shongwe, un investigador privado, después de ser atrapado volando un helicóptero de juguete con una cámara montada dentro del espacio aéreo del país. Más tarde fue acusado de operar una aeronave no registrada y por no presentarse para ser interrogado por las autoridades.