Fabre nació en una aldea de Francia llamada Saint-Leons. Era de familia demasiado pobre, y muy niño tuvo que vender limones para poder ir a la escuela. Resultó tan buen estudiante que obtuvo una beca para hacer sus estudios de enseñanza superior. En cuanto los terminó, a la edad de 19 años, comenzó a enseñar ciencias; pero al llegar a los 30, abandonó las clases para dedicar mayor tiempo al estudio de los insectos. Escribió muchos libros acerca de ellos; dos de los más conocidos son: "Nuestros humildes colaboradores y La vida de la mosca.
Los trabajos de Fabre pasaron casi inadvertidos hasta que llegó a la edad de 80 años; entonces recibió grandes honores y el gobierno de Francia le dio una pensión, como recompensa por sus estudios, que contribuyeron al progreso de la ciencia.