¿Cuáles son los peligros del monocultivo?


   El monocultivo es el cultivo de una sola especie, pero se ha con­vertido, sobre todo, en un cultivo de grandes extensiones como es el caso del sur de Sonora, en México, donde se cultiva exclusiva­mente trigo. Tal tendencia no se limita exclusivamente a los cultivos alimenticios, sino también a los industriales como la producción de textiles o aceites y a los bosques, donde las plantaciones se ha­cen frecuentemente de una sola especie. Estos métodos se opo­nen claramente a los antiguos, en los que mezclaban a menudo varias especies o variedades. En un medio desyerbado a mano y sin pesticidas los cultivos formaban, así, conjuntos complejos de plantas y animales; si una planta decaía, otras quedaban para llenar ese vacío. Todo esto permitía una mejor conservación del suelo.

   El monocultivo desde luego tiene algunas ventajas. El que haya una sola variedad permite escardar químicamente y tratar a los parásitos de manera precisa, sin embargo, esto puede crear también un campo de acción particularmente favorable para los parásitos, que tienen la posibilidad de desarrollarse, ya que los tratamientos no son jamás definitivos, pues destruyen parte de la población, pero, a la vez, seleccionan a los individuos resisten­tes al pesticida.

   El monocultivo también garantiza la existencia de grandes exten­siones limpias, es decir sin setos ni áreas baldías, como también la supresión de todos los depredadores y parásitos que puedan anidar en las proximidades, Con esto, sin embargo, también se da lugar a la desaparición de las defensas naturales; de modo que si se hace una falsa maniobra o el clima se torna más riguro­so que de costumbre, puede conducir a una catástrofe, compro­metiendo la totalidad de la cosecha.