El 25 de mayo de 1996 en Jena, Alemania en el Campeonato Mundial de pista y campo el checo Jan Zelezny arrojó una jabalina.
La jabalina viajó 98,48 metros estableciendo el récord para el lanzamiento de jabalina más largo del mundo.
Zelezny heredó su afición por este deporte de su padre, un buen lanzador de jabalina, y de su madre, quien aún posee el récord juvenil de su país en lanzamiento de jabalina.
Después de una carrera exitosa con la jabalina, Jan se retiró en una exhibición el 19 de septiembre de 2006 en Mladá Boleslav, el lugar donde inició su gusto por este deporte.