Algunos satélites en el espacio pueden detectar el movimiento de los peces.
Un satélite llamado NOAA-6 está explorando las aguas del Océano Pacífico desde Baja California, hasta Alaska con algunos equipos muy especiales. Estos dispositivos especiales son capaces de "ver" manchas frías en el agua del océano.
Estas manchas son causadas por la subida de las corrientes frías desde las profundidades del océano. Con estas subidas llega también el plancton, animales microscópicos del cual dependen muchos peces como alimento.
Además de encontrar estas subidas, el satélite NOAA-6 sigue sus movimientos que se encuentran a merced del viento. Toda esta información se envía a los pescadores, porque donde hay plancton, también hay peces.
La NASA, que desarrolló el satélite, está planeando un nuevo sistema que será aún más preciso en la detección de plancton. Será capaz de detectar la presencia de zonas verdes en el mar.
El verde es el color de la clorofila, y donde hay clorofila, hay plantas, y donde hay plantas, hay plancton que las comen, y donde hay plancton, hay peces.
La NASA planea construir uno de estos nuevos satélites para los pescadores del océano Atlántico.