Las miles de millones de células cuyo trabajo es mantener a nuestro cuerpo informado de las condiciones dentro y fuera de él, se llaman células nerviosas o neuronas. Las neuronas transmiten mensajes a través del cuerpo al pasar las señales, o impulsos, de una a otra.
Las neuronas sensoriales son las células nerviosas que llevan los impulsos de los ojos, oídos, nariz, boca y piel hasta el cerebro y la médula espinal. Ellas nos permiten ver y oír, oler y probar, y nos dice si estamos demasiado fríos o caliente, y nos permite sentir placer o dolor.
Las neuronas motoras son las células nerviosas que llevan los impulsos desde el cerebro a los músculos en el cuerpo, diciéndole a éste que se siente, se pare, corra, o hable.
Sin embargo otras neuronas funcionan automáticamente, sin recibir señales del cerebro. Estas neuronas mantienen los latidos del corazón, la sangre fluyendo, los pulmones respirando, y el estómago digiriendo la comida - todo automáticamente, sin órdenes por parte del cerebro.
Algunos impulsos viajan a través del cuerpo a una velocidad de más de 100 metros por segundo, ¡mientras que otros van tan despacio como 45 cm por segundo!