En el mar de la costa sur de Tasmania, Australia, fue descubierta la increíble cantidad de 274 nuevas especies de animales marinos. El hallazgo se logró gracias al Proyecto para la Salud de las Insignias Oceánicas, que consiste en hacer un inventario de las especies marinas australianas. También se encontraron ochenta nuevos montes marinos. Esta investigación solo abarcó dos de las catorce reservas que tiene ese país. Los montes son vestigios de antiguos volcanes y se elevan entre 200 y 500 metros por encima del lecho marino, sitios que son hogar de numerosas especies de coral y esponjas.
Entre las especies encontradas está el ejemplar del cangrejo Richopeltarion, uno de los crustáceos que vive a mayor profundidad en el mar. También se descubrió una mantarraya de la que sólo se conocía un espécimen muerto que apareció en las costas de Australia. Otra de las rarezas fue una esponja cristalina, tan frágil que no es posible trasladarla a la superficie sin romperla.