La controversia inició debido a una advertencia oficial a los turistas sobre la seguridad de visitar los lugares arqueológicos de Giza.
Hace unas semanas la embajada de EE.UU. emitió un aviso a los turistas pidiéndoles que "tomarán conciencia de la situación" al hacer una visita a las pirámides de Egipto. Según las autoridades, hay preocupación sobre la seguridad de los visitantes, debido a la "falta de seguridad visible". De particular preocupación son los incidentes en los que se dice que algunos grupos de irritados lugareños han rodeado los coches de los turistas tratando de obtener acceso.
Sin embargo, el Ministerio egipcio de Antigüedades ha restado importancia a esta preocupación y ha criticado a la embajada estadounidense sobre las advertencias, en cambio insisten que las afirmaciones son "infundadas" y que la zona de Giza es, de hecho, un lugar perfectamente seguro para visitar.