Una planta utilizada por primera vez hace más de 30.000 años atrás, podría ser vital en la lucha contra las infecciones resistentes como el SARM.
En una época en que se están desarrollando medicamentos y materiales cada vez más sofisticados para ayudar a lidiar con la amenaza de los súper gérmenes, los investigadores de la Universidad de Brighton han adoptado un enfoque diferente —mirando hacia el pasado. Han encontrado que las fibras de la planta del lino común son capaces de matar a las bacterias cuando son tratadas con tintes fotosensibles a la luz roja.
Los materiales hechos usando esta técnica podrían proporcionar una resistencia valiosa contra las infecciones bacterianas mortales en hospitales e incluso pueden ayudar a reducir la probabilidad de que las bacterias se vuelvan resistentes. "El uso de lino con el tinte reactivo podría beneficiar a los pacientes en los hospitales que tengan instalada luz roja ambiental y esto podría reducir la carga microbiana en ropa y camas", dijo el Dr. Iain Allan, uno de los investigadores del proyecto.