Ronda está asentada en una roca cortada en dos mitades por una profundísima garganta de más de 200 metros en forma de impresionante tajo vertical. Dicha cortada natural separa los barrios del Mercadillo y de la Ciudad. Las calles, regulares y bastante anchas del Mercadillo, o Ronda la Nueva, como también suele denominarse, reafirman su condición de centro comercial y ciudadano. Por el contrario, en la Ciudad o Ronda la Vieja, las callejuelas son tortuosas y estrechas, pero pintorescas; poseen arcos, edificios, artesonados y arabescos que revelan su origen y la convierten en un impresionante conjunto histórico-monumental. Tres son los puentes que unen las dos partes. El puente Nuevo, atrevido y seguro, que data del siglo XVII. El de San Miguelo de las Cortadurias, de origen romano. Y el Viejo, de construcción morisca.
El tajo de Ronda
Ronda está asentada en una roca cortada en dos mitades por una profundísima garganta de más de 200 metros en forma de impresionante tajo vertical. Dicha cortada natural separa los barrios del Mercadillo y de la Ciudad. Las calles, regulares y bastante anchas del Mercadillo, o Ronda la Nueva, como también suele denominarse, reafirman su condición de centro comercial y ciudadano. Por el contrario, en la Ciudad o Ronda la Vieja, las callejuelas son tortuosas y estrechas, pero pintorescas; poseen arcos, edificios, artesonados y arabescos que revelan su origen y la convierten en un impresionante conjunto histórico-monumental. Tres son los puentes que unen las dos partes. El puente Nuevo, atrevido y seguro, que data del siglo XVII. El de San Miguelo de las Cortadurias, de origen romano. Y el Viejo, de construcción morisca.