Sobre una colina que domina la ciudad de Granada, los antiguos reyes moros que conquistaron España construyeron el palacio fortaleza de la Alhambra.
El nombre árabe de la Alhambra, "al-Hamra", significa "la roja". Este nombre provendría del color dominante en muros y tejados. Este castillo rojizo, recinto fortificado y palacio, ofrece en su aspecto exterior una apariencia de solidez. Sin embargo, la decoración y las perspectivas interiores rivalizan en gracia, armonía y belleza. Los patios son numerosos: el de los mirtos con estanques alargados, el de Mexuar con su pavimento de mármoles y, sobre todo, el maravilloso patio de los Leones, el más refinado monumento del arte hispanomusulmán. Ciento veinticuatro columnas de mármol blanco bordean dicho patio. Y doce leones, en el centro, sostienen un pesado pilón, que recoge la caricia de un esbelto surtidor.