Sir Malcolm Campbell y su hijo, Donald. Cada uno fue campeón tanto en tierra como en mar.
Durante su carrera como piloto, Sir Malcolm estableció nueve marcas de velocidad entre 1924 y 1935. Fue la primera persona en conducir un automóvil a más de 480 kilómetros (300 millas) por hora.
Entonces cambió su atención al agua y en 1937 y 1939, Sir Malcom estableció nuevas marcas mundiales de velocidad en el mar.
Su hijo, Donald, estableció un récord de velocidad en tierra en 1964, y luego, igual que su padre, comenzó a concentrarse en la velocidad sobre el agua. En los siguientes años, estableció siete nuevos récords de velocidad en el mar.
En 1964, condujo un bote con un motor a reacción para convertirse en el primer hombre en viajar en el agua a 445 km (276 millas) por hora.