La Puerta del Sol


   En España se encuentran varias y famosas puertas del Sol; una plaza de la capital—Madrid—lleva todavía este nombre. Pero es en Toledo donde puede admirarse la más célebre de todas las puertas del Sol.
   Entre las antiguas fortificaciones de la ciudad de Toledo destaca la Puerta del Sol, una de las más bellas creaciones de la arquitectura mudejar. Fue edifi­cada hacia 1310 por los hospitalarios y poseyó carácter defensivo: se trata de una alta y gruesa muralla rematada por almenas y torre semicircular con aspille­ras. La abertura de la puerta de entrada forma dos líneas distintas superpuestas: un arco en forma de círculo casi com­pleto y un arco apuntado de línea típi­camente oriental. Una vieja leyenda asegura que Dios, tras haber creado el Sol, lo situó sobre la ciudad de Toledo. Con su orientación este-oeste, la Puerta del Sol es testigo invariable de la diaria aparición del astro rey y también de su ocaso.