José María Morelos


   José María Morelos (1765-1815) fue un cau­dillo de la guerra de independencia de México. Nació en Valladolid, ciudad llamada hoy Morelia en su honor, estado de Michoacán. Ordena­do sacerdote a la edad de 30 años, apenas se había iniciado en el ejercicio de su apostolado cuando, al producirse el movimiento emancipa­dor, se ofreció a Hidalgo como capellán de sus huestes, pero éste le confió inmediatamente la difícil tarea de levantar en armas la región me­ridional del país. Con sólo 25 hombres se le­vantó en armas y de su campaña se mencionan hechos tan sobresalientes como haber resistido más de dos meses el sitio de Cuautla que al fin rompió victoriosamente. Se apoderó, además, de las importantes plazas de Oaxaca y Acapulco. En Chilpancingo reunió en septiembre de 1813 el primer congreso me­xicano, al que se de­be la declaración de la independencia del país y la creación de instituciones de ca­rácter republicano.
   Al frente de un ejército de 20.000 hombres bien armados trató de apoderarse de Valladolid, si bien fue derrotado por Agustín de Iturbide, jefe rea­lista que después se unió al movimiento eman­cipador para más tarde erigirse en emperador. Morelos, replegado en Apatzingán, donde el congreso expidió en octubre de 1814 la primera constitución del México independiente, y tra­tando de evitar que cayeran en manos de los realistas los miembros del congreso, los cuales habían decidido trasladarse a Tehuacán, fue hecho prisionero en Texmalaca. Conducido a la ciudad de México, fue juzgado por el tribu­nal de la Inquisición y condenado a muerte, tras su degradación en auto público.